Los asesinatos de Manhattan


Es la tercera de la serie de novelas del agente Pendergast. Es posible leerlas independientemente sin seguir el orden de la serie y, aunque en algún momento se pueda hacer referencia a algún hecho ocurrido en alguna de las anteriores, no rompe el ritmo de la lectura ni representa un inconveniente para el lector.

Magnífica. Douglas Preston y el coautor Lincoln Child, han encontrado un filón en este agente del FBI, excéntrico, inteligente y culto, con una asombrosa capacidad para bregar con cualquier situación. Consiguen elevar la tensión del lector llevando al protagonista a situaciones límite, y creando una trama ingeniosa que consigue mantener el interés a lo largo de toda la novela.

La sinopsis:

Durante los trabajos de excavación para construir un nuevo bloque de apartamentos en Manhattan, los obreros hacen un descubrimiento espeluznante: los restos de treinta y seis personas torturadas y mutiladas, víctimas de un asesino que aterrorizó a la ciudad de Nueva York a finales del siglo XIX. El agente especial Pendergast del FBI convence a Nora Kelly, arqueóloga del Museo de Historia Natural, de que le ayude a resolver el misterio de aquellas muertes. Pero lo que era solo una inquietante investigación histórica se convierte en la caza desesperada de un cruel asesino, cuando sobre la ciudad se abate una oleada de asesinatos casi idénticos a los de un siglo atrás.